Portabrocas tipo llave
Características
1. Los portabrocas de llave generalmente están diseñados para aplicaciones con mayor par de torsión que los portabrocas sin llave. Esto los hace adecuados para tareas de perforación pesadas que requieren mayor potencia.
2. Los mandriles de llave cuentan con un diseño de tres mordazas que proporciona un agarre más seguro a la broca. Esto garantiza que la broca permanezca firmemente sujeta durante la perforación, reduciendo el riesgo de deslizamiento o tambaleo.
3. El mecanismo de llave permite apretar con precisión el mandril, asegurando que la broca esté centrada y alineada correctamente. Esto resulta en una perforación más estable y precisa, especialmente importante en aplicaciones donde la precisión es crucial.
4. Los mandriles de llave suelen estar fabricados con materiales de alta calidad, como acero o acero endurecido, lo que los hace más duraderos y resistentes al desgaste. Están diseñados para soportar un uso intensivo en entornos exigentes.
5. Los mandriles tipo llave son compatibles con una amplia gama de brocas, lo que le brinda la flexibilidad de utilizar diferentes tamaños y tipos de brocas para diversas aplicaciones de perforación.
6. El agarre seguro que proporciona un portabrocas de llave reduce el riesgo de que la broca se resbale o se dañe durante la perforación. Esto ayuda a prolongar la vida útil tanto del portabrocas como de la broca.
7. Los mandriles de llave suelen admitir brocas más grandes que los mandriles sin llave. Esto los hace adecuados para taladrar materiales más gruesos o para aplicaciones que requieren agujeros de mayor diámetro.
8. Los portabrocas de llave suelen tener piezas reemplazables, como mordazas y llaves, que se pueden reemplazar fácilmente si se desgastan o dañan. Esto prolonga la vida útil del portabrocas y permite un mantenimiento económico.
FLUJO DEL PROCESO
